soneto

hay lágrimas que arden en las mejillas
y el universo negro nos rodea
nuestros cuerpos caen sobre la marea
como mentiras sobre nuestras vidas.

la corriente del viento nos da alas
y cuando tú asciendes,ronronea
ofreciéndote una gran odisea
de altas nubes dormidas y sin penas.

podemos quedarnos hasta la muerte
-me decías tapándote los ojos
por el miedo a mi mirada devuelta.

hagamos del viento nuestro destino
y podremos volar infinitamente
sin mirar abajo, lejos, lejano.