lunes, 26 de noviembre de 2012

todavía me invade el recuerdo triste y tierno
del funeral
y viendo a mi padre de reojo, su mirada serena
pero su corazón roto
y pensé "¿por qué no llora? porque cree que así es más valiente, pero los valientes también necesitan llorar"

ese día conocí la muerte, sólo era una niña.